domingo, 24 de junio de 2012



Las Notas desde el Chinchorro Sutra
Por Carlos Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba

Quizás nuestra única certeza en la sexualidad humana, sea la incertidumbre


¿Cómo se finaliza?

Un lector me señala que su matrimonio de casi siete años, el cree que ha llegado a su fin y no sabe el por qué  su pareja está cada día más distante, el  concluye su interesante correo con una pregunta ¿Cómo se llega al fin del matrimonio?

Así amigo como hay muchos caminos para Roma también hay muchos camino para el fin y este  suele ser por  incompatibilidad sexual o de caracteres, inmadurez, maltrato psicológico y aun físico, abuso sexual, desincentivación o desinterés, frialdad en el amor, frigidez,  infidelidad, y otros motivos son los que suelen aludir  tanto quienes se han separado como quienes manifiestan el deseo de hacerlo.

También se llega a un fin cuando un miembro de la pareja sufre de alcoholismo o  drogadicción, también la depresión así como otras enfermedades neurológicas, la bisexualidad, el vaginismo o dispareunia, la impotencia, el excesivo interés por el trabajo con el consecuente descuido de la pareja y de los hijos, los celos, el mal genio y la frialdad.

Para mi punto de vista hay dos grandes grupos de causas para el fin de la pareja: las sexuales y las psicológicas. Cuando la estudiamos casi siempre nos conseguimos con enormes sorpresas por ejemplo:

La frigidez consiste en la inhibición de la excitación sexual de la mujer. Cuando es de origen orgánico es rarísima; por el contrario, es muy frecuente que se informe de casos en los que la mujer descubre que su esposo sólo la busca para complacerse genitalmente, lo que deriva en esa ausencia anormal de deseo o de goce sexual.

Muy pocos hombres son los que buscan las respuestas de sus crisis de pareja en la conducta femenina, mientras que la mujer debe aprender a oír y ver las señales del hombre quizás esta sean las claves para un matrimonio longevo y feliz ya que uno de los secretos de una pareja sana y estable está en que ambos deben de aprender a compartir las emociones y los afectos, y desde luego amar desde la profundidad de su ser

La parejas longevas posen un gran secreto basan su relación en la entrega mutua y total del propio «yo», sin condiciones ni reservas egoístas, y para siempre, habrá verdadero amor. La felicidad del otro se erige en lo principal: el que ama trabaja por la felicidad del otro con todo el ahínco, con toda la fuerza de que se es capaz, y no le importa el sacrificio que para ello tenga que realizar. Por eso se dice que  la prueba de amor más grande es el sacrificio.

Hazte esta pregunta amigo: ¿Cuántas veces el uno ha sido generoso con el otro?, ¿Cuántas veces ha dejado a un lado sus intereses, metas e ilusiones personales, para buscar la felicidad del otro? Es decir, cuántas veces se ha sacrificado ella por ti y tu por  ella.

La Masturbación Femenina

Recibí un gracioso y bello correo de una joven pidiendo que le hable sobre la masturbación femenina, ella está todavía atrapada entre el tabú del pecado y la verdad humana, pero nuestro cuerpo posee una realidad que no debemos confinarlo a los prejuicios y tabúes.

Saben,  entre un 70% y un 85%  de las mujeres se masturba hasta el orgasmo alguna vez en su vida. Muchas empiezan pasados los 20 años, o cuando ya han realizado el coito. Es posible que algunas mujeres no se masturben nunca. La frecuencia suele variar dependiendo de las circunstancias, pero la investigación demuestra que las mujeres que mantienen una relación sexual activa, se masturban tanto como las que no la mantienen.

 La masturbación es un excelente modo de descubrir tus respuestas sexuales, además de satisfacer tus deseos. La masturbación es una experiencia muy personal y privada. Muchas mujeres descubren masturbándose formas mejores de excitarse y de llegar al orgasmo durante el coito, incluso puede contribuir a que algunas experimenten orgasmos múltiples. Hay mujeres que se tumban quedándose quietas al masturbarse, usando las manos sólo con los genitales. Otras prefieren moverse vigorosamente y acariciarse los pechos con las manos, además de los genitales. También se puede recurrir al uso de lubricantes para ayudar a que los dedos se deslicen, intensificando el placer de la masturbación.

Ahora como masturbarse, esto dependerá de las necesidades sexuales de cada mujer ya que varían ampliamente. Cada mujer tiene sus propias preferencias y deseos. Lo mejor es descubrir cuáles son las necesidades de tu compañera, para ayudarte puedes pedirle que te guíe su mano y te enseñe lo que más le gusta. No es necesario que te concentres sólo en los genitales, recuerda también los senos y el ombligo. Acaricia el prepucio del clítoris primero por un lado y después por otro, acordándote de variar el ritmo y la presión. Es fundamental que las presiones sobre el clítoris sean pequeñas para no reducir la estimulación. Los labios menores o internos son muy sensibles al tacto. Acaricia la vagina con toda la mano y si la lubricación es adecuada introduce tus dedos en el interior de la vagina. La masturbación siempre será una experiencia personal aun estando apcompañada.

Nota: Nada dura para siempre, ni siquiera el futuro lo interesante es redescubrimos constantemente y surgir de uno mismo como el ave fénix

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