Sexo Salud
Por Carlos
Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba
La Dualidad en la sexualidad
Estando en el parque Ruiz
Pineda un conocido sexólogo me preguntó si yo era sexólogo medico y desde luego
que no, lo que yo soy es un amante de la sexualidad y
creador de unos de los libros más vendidos en los tres años que tiene de
editado por Libros El Nacional que va por su tercera edición
en Venezuela con más de 200 mil ejemplares vendidos en el exterior y pirateado
por más de dos docenas de editoras en el continente.
Los filósofos, amantes de la
sexualidad humana y estudiosa de esta, no nos interesan el funcionamiento
biológico del clítoris. Esto no quiere decir que no estudiemos como funciona,
pero más nos interesa la relación entre la
magnitud de un estímulo físico y la intensidad con la que este es
percibido por parte del alma.
Es así como hemos aportado en
diversos tópicos o temas sobre la sexualidad humana por ejemplo la dualidad
sexual. Sabemos que este mundo es dual y dual significa
dos. Dos es un par como son el hombre y la mujer que se unen en pareja. La
pareja es la primera dualidad aparente como son frío y calor,
justicia e injusticia, placer y dolor, compañía y soledad, premio y castigo,
amor y odio, lindo y feo, ricos y pobres, sanos y enfermos, bien y mal o la
luna y el sol.
Estas dualidades son reales
¿Pero qué tan verdaderas?. Todo dependerá de nuestro discernimiento que es la
palabra clave en la relación de pareja, ya que discernir entre lo real y lo
ilusorio, es la mejor manera para caminar hacia la verdad.
Tanto la
ilusión como realidad y verdad es una trinidad casi sagrada,
ya que la ilusión es el primer eslabón de lo que parece ser,
si profundizamos un poco mas llegamos a la realidad que es aquello que
está, y si hacemos que los lazos afectivos surjan y se
entrelace llagamos a la verdad que es aquello
que es.
La ilusión amigos cambia
constantemente. Aquello que ayer te daba placer, hoy te causa hasta molestia y
hastió. La realidad puede ser modificada, y algo que está, puede dejar de
estar. Mientras que la verdad no cambia nunca. La verdad es siempre la misma. La
verdad carece de atributos, carece de bueno o malo. La verdad es, y como tal,
no puede ser calificada, y está más allá de la dualidad.
Aquí no importa como es la
estructura del clítoris, ni el tamaño del pene. Lo que importa es
que uno se pueda sentir bien enraizado en lo terrenal y carnal, pero
al mismo tiempo uno se sienta muy bien en el mundo de lo espiritual,
con la misma fuerza en ambas direcciones; es decir la sexualidad humana
es y será mayor cuando es con el cuerpo y el alma.
La sexualidad y
sus mitos que generan la Defunción Eréctil
Una de las preocupaciones de
hombre es el tamaño del pene y su rendimiento. Las
mujeres para nosotros los hombre, siempre serán un sexo por
descubrir e incluso entender, especialmente en la sexualidad.
Históricamente no hemos dejado
alienar por una serie de mitos y creencias los que perpetúan los pensamientos,
sentimientos y conductas de hombres y mujeres y los que más tarde crean las
disfunciones sexuales masculinas, como son:
• Los hombres son máquinas de placer: la idea del hombre es la de “saciar”, dejar “a gusto” a su pareja, y ese “dejar bien” pasa inevitablemente por haber mantenido coito con un pene como un mástil y durante mucho tiempo.
• En el sexo lo importante es
el rendimiento: lo que interesa es cuánto tiempo ha conseguido estar “metiendo
y sacando” sin eyacular, pues esto debe ser garantía de haber hecho lo que se
esperaba de él.
• La cantidad de orgasmos
indica en qué medida la relación sexual ha sido satisfactoria: ¿Cuantos más
orgasmos mayor satisfacción?
• Si no hay erección no hay
sexo: el pene es el director de orquesta de los encuentros eróticos, de manera
que si este no está o se ausenta no hay concierto. El coito sigue siendo la
base de las relaciones sexuales. Los encuentros amorosos no se perciben como
completos y satisfactorios si este no ha estado presente. El placer queda
reducido y vinculado a la penetración.
• Cuanto más grande sea el
pene la mujer más goza. Siempre es mejor un pene grande que uno pequeño,
ya que un hombre con pene grande es mejor amante y más viril.
• El hombre lo sabe todo sobre
el sexo: en la cama al hombre se le infiere que debe dominar el arte de la
adivinación y de la búsqueda del punto que hará que ella alcance el
clímax.
• Los machos no fallan en la cama: el pene debe estar siempre firme, dispuesto en cualquier momento y situación o con cualquier persona.
• Los machos no fallan en la cama: el pene debe estar siempre firme, dispuesto en cualquier momento y situación o con cualquier persona.
La mayoría de las creencias
sexuales de los hombres se basan en el pene, su tamaño y su rendimiento. Esto
inevitablemente lleva a crear las disfunciones sexuales masculinas pero muchos
olvidan que la mujer posee un cuerpo maravilloso para ser acariciado, besado,
lamido y sobre todo mucha piel para ser explorada, compartida y disfrutada. El
pene hace gozar a las mujeres cuando está erecto, pero también ellas
pueden disfrutarlo aunque no lo esté.
Las mujeres sí quieren
disfrutar de su sexualidad, pero sobre todo de la intimidad, del afecto,
erotismo, comunicación, acercamiento y muchas otras necesidades que van más
allá del tamaño o el rendimiento de un pene.
Nota: Para mayor información Unidad del Estrés la Ansiedad y las
Emociones del Centro Cardiológico Integral Cel. 04249294891.
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