miércoles, 16 de marzo de 2011

El lenguaje que no miente.



El lenguaje que no miente.

por Carlos VIcente Torrealba
 
  Hay muchos lenguajes, algunos nos hablan.  Ese es el mayor de ellos,   ya que suele ser   superior a la palabra,  debido que este no miente.  Saben amigos, cuando conversamos con alguien, no solo sus palabras y la nuestra   expresan emociones, deseos, sentimientos, o opiniones, es que  nuestro cuerpo las reafirman o las dejan al descubierto  es este lenguaje de gran importancia para nuestra sexualidad ya que él dice siempre la verdad.
 
Generalmente no somos consciente que nuestro lenguaje corporal.   Se está expresando constantemente y en forma continua trasmitiendo mensajes. De allí que los humanos somos como linternas que proyectamos hacia  afuera lo que llevamos por dentro.
 
Son los gestos y las posturas donde se expresa este lenguaje,  los movimientos son como las palabras que nacen de las  manos, piernas, brazos, de las distintas expresiones del rostro de la intensidad de la mirada  y por supuesto de  todo el  cuerpo.
 
A mi me gusta leer el cuerpo de otra persona, ya que es una ventana donde podemos observar sus emociones y las reacciones de los hombres y mujeres que llevan esos cuerpos, además siempre queda al descubierto las características de la personalidad de cada uno como timidez, seguridad, agresividad, entre otras.
 
Particularmente estoy convencido que debemos aprender a  leer ese “hablar del cuerpo” ya que es la única vía  para manejar nuestras propias emociones...Muchas veces cuando estamos ejercitando nuestra sexualidad este  dice lo que las palabras no consiguen decir y lo bueno que no miente  
 

El mejor lazo y el más fecundo


El mejor lazo y el más fecundo

Por Carlos Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba

Los humanos somos como linternas que proyectamos hacia  afuera lo que llevamos por dentro.

Una de nuestras lectoras nos escribió un hermoso correo, este inusualmente estaba cargado de sentimientos y a la vez con un gran temor; sus preguntas con algo también de angustia que se tejían como si se tratara de múltiples filigranas unidas por un mismo cordón. Todas ellas giraban sobre el compromiso. Ella preguntaba:  ¿Por qué le tengo tanto miedo al compromiso? ¿Es quizás este temor el que me ha estropeado mis relaciones? ¿Por qué nunca he podido permanecer largo tiempo con la misma pareja?

Para empezar amigos lectores, sé por experiencia que es gratificante, enriquecedor y muy sano despertarse con la misma persona cada día, sobre todo cuando sabemos y comprendemos por qué nos ama. Horrible amigos es  caminar sólo y  sin un  rumbo por la vida y para colmo tratar de conseguir alguna cita para intentar  obtener ese algo que nos libere de esa marcha a ciegas en ese limbo de la soledad y muchas veces de tanto los cuerpos pasar de mano en mano,  al final siempre se  borran las huellas del alma.


Tanto el hombre como la mujer pueden tener diferencias en sus percepciones de las cosas y más en las respuestas a ciertos estímulos. Los que han estudiado la “fenomenología del compromiso” han notado esas diferencias entre ambos sexos aunque lo curioso es que los resultados siempre son los mismos. 

Jamás se debe tomar el compromiso hacia una persona a la ligera, ya que es una cosa muy seria que debe estar sustentado por razones correcta. Hay un grupo importante de humanos que le tienen un miedo profundo al compromiso, esto siempre es el mayor obstáculo en una relación, ya que la sexualidad sin compromiso puede funcionar como unas cortas vacaciones pero siempre muy costosas, sobre todo para nuestra propia vida.


Usted se ha preguntado alguna vez ¿Por qué las mujeres le temen el compromiso? Generalmente una mujer puede tenerle miedo al compromiso cuando la han utilizado y lastimado, mas si es en forma continúa como engañándola o mintiéndole y sobretodo jugando con sus lazos afectivos. Cuando una mujer es ese tipo que ama demasiado y se entrega a hombres insensibles y que buscan satisfacer sus necesidades  de “cabritos”,  ella terminará desconfiando en todos los hombres. Si la mujer jamás se ha casado, pero su vida ha sido un rosario de parejas su mayor mal es que no ha tenido el carácter suficiente para respetarse ella misma y si ha sido una abnegada esposa pero su marido la ha engañado y abandonado cuyo resultado  es un simple divorcio, esa mujer pasará a la cifra de seres   totalmente desarraigados, y tendrán que empezar de nuevo y casi siempre estará muy poco preparada para ese nuevo camino que es parte tortuoso y lleno de símbolos del pasado


 En los hombres la pregunta ¿Por qué ellos le temen el compromiso? Es quizás más simple, un grupo no quiere perder la libertad. Generalmente son como esos potros cimarrones que quieren andar libres por el mundo y jamás madurar; otros se han acostumbrado a engañar a sus parejas y como niños malcriados desean tener su juguetes y el de los demás, estos son los que no tienen una pareja más bien un cúmulo de jarrones con carne hueso y olvidan siempre que poseen alma. Algunos de estos hombres reaccionan así porque fueron engañados y también abandonados por sus esposas o novias. En nuestra sociedad la muerte más dramática para un hombre con dignidad es ser engeñado por su pareja.

Querida lectora usted siempre decidirá entre enfrentar ese temor o acostumbrase a su soledad y que esporádicamente algún hombre como el causante de su miedo aparezca se acueste con usted y amanezca con su esposa a kilómetros suyos. el  miedo al compromiso es como una mesa de tres llamada fracaso, al rechazo y  pérdida. El compromiso siempre es creador y nutre el alma.

La sospecha


La sospecha

Por Carlos Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba

Viendo, leyendo y escuchando a los dos sectores que han tomado a nuestro país, al opinar sobre los últimos acontecimientos universitarios en nuestro nación, surge una sospecha. Esta como todas, conduce a una búsqueda y es  que la sospecha de que la frontera entre el mundo del desarrollo universitario y el mundo del subdesarrollo de éste, no es en última instancia económico o político sino cultural.

Mientras que unas naciones realizan el mayor esfuerzo por tener las mejores casas de estudios, fortaleciendo todas sus redes de información y conocimiento hasta la optimización del sistema alimentario de sus alumnos, ya que están conscientes que son estos que al final va a nutrir sus aéreas de desarrollo e investigación.  Hay al mismo tiempo en escasos países como el  nuestro, donde el empobrecimiento ha llegado a sus universidades y es que ambos mundos universitarios son impulsados o detenidos por sus ideas y valores.  Ya que hay valores que favorecen el desarrollo de sus universidades y hay valores que se resisten al desarrollo de estas, nuestro declive universitario como el de nuestra sociedad, sospechosamente ha  sido después de todo un fenómeno cultural.

Podemos históricamente notar una constante en los países subdesarrollados y empobrecidos. Es su  moral que suele ser  un simple derivado o dependiente de un partido político,  una ideología o de un grupúsculo económico que controlan el poder.  Mientras en los países que han alcanzado un estado de bienestar, el fenómeno moral consiste que cada individuo se siente obligado en primera instancia consigo mismo y con su sociedad.

Sospechosamente las personas auténticamente morales, dan sus propias normas, se atienen a ellas, es autónoma. (auto -en griego- “uno mismo” y nomos “es ley”).  Esto trae como resultado la conciencia de las cosas, cuyo mayor valor es precisamente el ser humano.

Sabemos que ningún estado puede permitir un estado paralelo. La autonomía universitaria no es un estado dentro de otro estado, ya que esto  está muy bien definido por la ley, así como que sus autoridades deben rendir cuenta por los recursos que han recibido.    

Lo preocupante como nación, como estado más que como gobiernos es el empobrecimiento de la sociedad del conocimiento. He allí la sospecha del ¿Por qué?,  ¿El para qué?, ¿Cuál nación es la que amamos?,  ¿Cuál es la gente que defendemos?

miércoles, 9 de marzo de 2011


Pensamiento
Por Carlos Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba

Particularmente creo que el pensamiento puede ser un mecanismo automático del cerebro que permite  realizar las cosas que están relacionadas con la  realidad. Ahora, lo fascinante es que no necesita de la presencia de esas  cosas para que éstas existan, y lo verdaderamente extraordinario  es que a través de él, se  resuelven problemas y  podemos razonar.

Sabemos que la inteligencia está relacionada con el pensamiento pero cuando buscamos los hombres que se han caracterizado por un pensamiento excepcional como Sócrates o Platón, nos damos cuenta que el pensamiento nace a partir de la conciencia humana.  Al ir desarrollándose la persona, se va agudizando la inteligencia, pero a partir de la base más importante, como lo son las palabras. De ahí que estos hombres y sus palabras conformen parte del pensamiento occidental,  trayendo consigo la   "conciencia" y la conducta.

El  comportamiento del venezolano es imprescindible analizarlo, ya que este impone una  reflexión para llegar a una comprensión de lo que somos, tanto como individuos o como sociedad con una  elaboración y  concepción muy particular de nuestra forma de ser que nos ha caracterizado en estos últimos trescientos años, donde hemos tenido un  discurso fragmentado, intervenido por  esa forma tan particular y  tangencial de afrontar nuestros  problemas y siempre con la mejor disposición de desviar o rodear la verdadera solución de este.

¿Cómo es el pensamiento de venezolano?  O mejor, ¿cómo opera el pensamiento que nos piensa con en esa condición trágica de burlarnos de todo, hasta de nuestra tragedia y mas, la de los otros?; o en esa forma dual al hablar ya sea con la chanza o el morbo; ¿o qué  tipos de solidaridad manejamos?, ya que a veces tenemos  un desprendimiento estoico u otras casi suicida, sobre todo cuando entregamos a otros lo que más necesitamos. ¿O cómo es el manejo de la perdida hoy?, ya que hasta para hacer  mercado parecemos que fuéramos a un funeral. O esa  proliferación de lo material, como sustituto de los lazos afectivos, siendo el verdadero epicentro donde perdemos el alma o nuestra hermosa cotidianidad que la politiquizaron y ya  nos asfixia  o esa  indiferencia a nuestras necesidades básicas que de ser una imagen casual se ha convertido ya en un símbolo de nuestra decadencia. ¿Cómo es el pensamiento que nos piensa?
 

martes, 8 de marzo de 2011

¡No pueden sentir un orgasmo!

¡No pueden sentir un orgasmo!

por Carlos Vicente Torrealba 

Una lectora nos escribió haciendo esta pregunta ¿Que es  Anorgasmia?   Esta palabra se constituye al unir "an" con "orgasmo". "An" proviene del griego y quiere decir negación o privación, mientras que "orgasmo" del griego "orgasmos" que significa "culminación del placer".

Las mujeres que padecen de Anorgasmia no quieren decir, que  no tenga un impulso sexual. El  problemita está en  que su respuesta a esta excitación queda bloqueada estancándose en la fase de la meseta o muy cerca de ella. Muchas de ellas aunque se estimulen el clítoris, tienen problemas para alcanzar el clímax u orgasmo.

Saben que hay mujeres que nunca han sentido un orgasmo en toda su vida, (es como no sentir la vida), hay otras mujeres que no pueden sentir orgasmo en el coito, pero si con la masturbación o mediante su estimulación, tanto sea oral, como manual (una ventaja). Hay mujeres que si se pueden estimular solas, y no se sienten estimuladas por su pareja (el remedio no es cambiar de pareja)

Esto es   debido a multitud de factores, bien porque han tenido una historia de adoctrinamiento sexual negativo, considerando el sexo como una repulsión; bien porque sufren ansiedad  o por miedo a ser abandonadas por su pareja.

La psicología femenina es muy compleja y la mayoría de veces el motivo por el cual una mujer no pueda llegar a sentir el orgasmo es por causas psicológicas,  ya que hay sentimientos de culpa, de miedo al compromiso o quizás sentirse abandonada. Miedo a perder el control de su conducta, el control de sus sentimientos, el control de sus emociones. La culpabilidad ligada a tocamientos incestuosos durante la infancia, un primer acto sexual doloroso o traumatizante, actos repetitivos insatisfactorios.


La nota achicharrada

Los Humanos estamos en un constante  conatus (conato). El deseo es una necesidad, la pasión es un concepto filosófico, el amor es la razón de la existencia, el pacer una repuesta y la sexualidad mala o “majunche”  casi siempre resulta de problemas emocionales, mentales y físicos.

¡Como pedir!


Por Carlos Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba

Un buen orgasmo empieza en el cerebro, se nutre en el alma y se expresa en el cuerpo
¡Como pedir!

Un gran número de las personas que nos mandan correo preguntan: ¿Cómo hacer para decirle a su pareja, lo que quieren en la cama? Lo más curioso es que ambos saben lo que quieren en ella, la cosa está en como decirlo.

Todo en la vida humana es una negociación, esto no implica un trato comercial. La negociación en nuestro repertorio sexual  como pareja debe llevar implícito la honestidad y el respeto, tanto en uno como en nuestra compañera, ya que es una necesidad fundamental en una buena relación. La mujer suelen decir con su lenguaje corporal cuando está incómoda con una posición o una forma en particular de ejercer la sexualidad, pero también con ese lenguaje expresa su  comodidad bajo ciertos estímulos.

Lo importante amigos, es que cuando se  comparte el  deseo sexual en pareja y hay una fluidez en el lenguaje y en el entendimiento de las partes, muy pocas veces se acarrea  algún tipo de estigma, ya que cuando se hace la sexualidad como un acto intensamente personal donde no se toma en cuenta a la otra persona, generalmente  esta termina sintiéndose   vulnerada. Particularmente pienso que  ninguno de los dos deberá hacer algo que no quieran hacer, menos si  causa incomodidad  alguna de las partes.

Se que en ciertas condiciones es muy difícil rechazar una fantasía o un juego que quiera experimentar tu pareja,  sobre todo que casi siempre se puede tomar como un rechazo hacia él o ella. De allí que hay que saber como decir no. Cuantas cosas se hubieran evitado con un no oportuno. Hay  muchas mujeres que el gran drama de su vida ha sido precisamente en permitir una serie de posiciones y estímulos que empezaron como juegos inocentes y terminaron ellas siendo utilizadas, vejadas y al final abandonadas.

Hay una técnica que yo llamo particularmente,  el bumerán  y es cuando le piden algo a uno y uno dice que lo pensará y luego en nuestra tranquilidad cambiamos la perspectiva de la pregunta como si fuera un bumerán y nos hacemos esta pregunta: ¿Qué causó su interés en esa fantasía? ¿Por cuánto tiempo ha estado fantaseando al respecto? ¿Cómo visualiza que se lleve a cabo?  Esta es la única forma de entender y aceptar el  deseo  de nuestra pareja y desde luego, jamás juzgar a tu pareja por esto.

La sexualidad enriquecedora y creadora  siempre tiene que ser en tono positivo. De allí que tenemos que tener en  cuanta que  tu compañera o compañero, corre un riesgo cada vez que busca intimar contigo y trata de complacerte. Así  que no vas a cerrar las puertas o de avergonzarla, menos que le generes  un  miedo de compartir sus ideas, ya que al final estarías creando la posibilidad  de que te deje de buscar para tener una sexualidad contigo.

Uno puede decir no en un momento, pero lo interesante es que uno jamás puede decir  nunca.  No solo es increíblemente negativo, también elimina la posibilidad de cambiar y los cambios correctos y positivos en la vida  puede hacer que hagas cosas que nunca pensaste que podrías hacer.

Recuerden algo amigos, cuando pida algo a su  pareja, nunca lo hagan cerca de la cama  o del chinchorro  para que no generen tensión o conflicto en el lugar donde ejercitan su sexualidad, a menos que sepas que tu pareja sentirá excitación con la idea en lugar de ofenderse con tu solicitud.


Lo humano


Lo humano

Por Carlos Vicente Torrealba
Twitter: @cartorrealba

He ahí donde todo se da y todo se pierde. He ahí donde las ilusiones nacen y con el devenir de la pleamar mueren,  son como  naufragios en oasis de limbos, que están rumiando su desamor hasta que llegan como un amanecer en su propia oscuridad, una nueva ilusión que lo hará renacer como aquel niño que fue y a la vez es y todo tan solo por ser humano.  

Si es que solo los hombres mueren una sola vez,  pero el humano no, quizás por poseer o haber alcanzado esa condición de humano, sabemos  que la muerte física es  única y a la vez irrepetible, aunque en el mundo humano donde el valor afectivo es una constante se puede morir miles de veces.

Los humanos somos los únicos que poseemos un mundo afectivo, con nuestras propias causas afectivas, hasta creamos nuestro propio decálogo de resistencia emocional,  donde podemos agonizar, morir y resucitar para volver  a la misma vida con ese mismo ser donde morimos una vez, para caer en una espiral de un amor irracional, irresponsable, dañino, ya que el verdadero amor es el que te hace crecer, aunque tengas miles de dificultades siempre creces como individuo y como ser.

Aparte de todos los avatares que conlleva vivir en sociedades enfermas, llenas de doble moral y que los antivalores tienden a convertirse en valores absolutos cargando su propia ideología de lo absurdo, el humano crea lazos y vínculos tanto reales como virtuales. Hoy las parejas se encuentran ante un gran reto y estas son las redes sociales que fueron creadas para mantenerse en contacto con amigos y familiares.

Algo que ha llamado la atención a muchos estudiosos del comportamiento humano es queel 80% de las pruebas de infidelidad que se presentan en los tribunales son obtenidas dentro de las redes sociales. Nada mas  el año pasado se registraron en el mundo 28 millones de separaciones a causa de esta forma de comunicación.

Cada año, más y más personas  usan la red social para buscar una pareja o encontrar a un antiguo amigo. Otras utilizaron la red para reencontrarse con sus exparejas, reencuentros que estadísticamente terminan en conversaciones de contenido sexual. Lo cierto es que el humano también se esfuerza y crea un andamiaje para poner en riesgo su ecología afectiva y es que también tiene la condición de jugar con el mismo como en una ruleta rusa arriesgando contradictoriamente  lo que le permite crecer como humano.